Líneas de Trabajo

 En el laboratorio de Ecología Química realizamos investigación alrededor de dos grandes temas: a) Ecología de la defensa química de las plantas contra herbívoros y patógenos, y b) Ecología de malezas, con especial atención a plantas invasoras.

Por un lado,  buscamos entender los patrones y el funcionamiento de las relaciones entre las plantas y sus consumidores intermediadas por sustancias químicas, y por otro, queremos descubrir los factores que nos permitan entender los procesos y consecuencias de las invasiones de malezas y predecir cuáles son los tipos de plantas introducidas a México que podrían causar problemas en el futuro.

 

a) Ecología de la defensa química de las plantas contra herbívoros y patógenos (Ecología Química):

Partimos de la premisa de que si se puede entender la defensa de las plantas en todas las escalas (tejidos, individuos, poblaciones y comunidades vegetales), entonces podemos contribuir al diseño de agroecosistemas sustentables y a prácticas que aumenten las posibilidades de éxito en la restauración y conservación de la naturaleza.

En la defensa de las plantas están implicadas muchas variables distribuidas en una gama muy amplia de dimensiones. Por ejemplo, resulta vital entender la ecofisiología implicada en la producción y mantenimiento de los metabolitos secundarios en los tejidos vegetales así como el entender la relación de los enemigos naturales de los herbívoros y de los fitopatógenos. Esto implica que en nuestras investigaciones se requiere de la participación de investigadores de diferentes disciplinas y que trabajan a diferentes escalas. Tenemos varios proyectos en desarrollo relacionados con la importancia de la variación de los metabolitos secundarios en el uso medicinal de las plantas y con la importancia de la variación de los metabolitos de los árboles de aguacate y de las huertas donde se cultivan. Hasta ahora, hemos trabajado con varias hipótesis entre las que se encuentran las siguientes:

1. Las plantas con mayor diversidad y concentración de metabolitos secundarios están mejor protegidas contra herbívoros y patógenos que las plantas con poca diversidad y/o concentración de metabolitos secundarios.

2. Las poblaciones vegetales con mayor diversidad de fenotipos químicos reciben menos daño por parte de herbívoros, parásitos y patógenos que las poblaciones con menor diversidad.

3. Las características antiherbívoras de las plantas y su variación intra-poblacional son más efectivas, limitando el daño por herbivoría y dificultando la evolución de cepas de herbívoros devastadoras, cuando la actividad de los enemigos naturales de los herbívoros es alta que cuando los enemigos naturales están ausentes o con poca actividad.

 

b) Ecología de malezas, con especial atención a plantas invasoras (Malezas):

En esta línea de investigación siempre hemos tenido la premisa de que las plantas arvenses, rurales, o no deseadas (esto es, malezas), son componentes ineludibles de ecosistemas antropógenos. En los agroecosistemas, o en cualquier otro ecosistema, estas plantas pueden funcionar de maneras múltiples con los humanos, sus cultivos, otros componentes bióticos del sistema o influir en los procesos ecosistémicos que son aprovechados por los humanos. En ocasiones, las malezas pueden ser altamente nocivas, pero en otras, benéficas.

Así, creemos que el conocimiento de las malezas, sus patrones de distribución y sus interacciones con los humanos y otros organismos, resulta crucial para lograr un manejo sustentable de este grupo de plantas.

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